Qué bonito se veía el valle y cuantas cosas se podían hacer con
este clima. El compromiso que había adquirido la Sra. Sapicornia con ella misma
era de no mirar atrás y aunque a veces seguía imaginando encuentros
reconfortantes bajo el manto del buen tiempo, era indiscutible su realidad.
Su libreta de historias le servían para poder ser objetiva con
ella misma y aunque a veces parecía rozar la obsesión por su manera de
destripar las cosas, ella sabía que simplemente fue amor.
En un animal de leyendas, es obvio que sus historias sean también
pasionales, pues sólo aquellos que viven la vida intensa descubren otras formas
de soñar y a la Sra. Sapicornia siempre le gustaron los cuentos, pues como si
no iba a ser una Unicornia.
La Sra. Sapicornia que era pura energía esos días, canalizaba la
exaltación para no traicionar a su esencia, pero realmente existía un mundo
excesivo donde pecar resultaba muy sencillo.
Sentados en la taberna de un viejo Lobo de mar, saciaban su sed el
Sr. Hormiga Feliz y la Sra. Sapicornia aquella casi llegada noche. Contemplando
el extenso abanico de apariencias que se iban mostrando de forma aleatoria,
aparecían buitres con diferentes pelajes pavoneando sus extensas alas dejando
claro mediante danzas, que pretendían apareamiento.
Curiosa mezcla...se decía la Sra. Sapicornia que lejos estaba de
creerse un ser superior, y aunque disfrutaba del ambiente comentaba a su fiel
amigo el Sr Hormiga Feliz… pero que lejos ha quedado el romance....
Estaba claro que si continuaba así, aunque simplemente fuera por
estadística, daría con algún animal que le hiciera gracia con el que más tarde
poder dibujar colores en sus sombras. Para la Sra. Sapicornia la vida
carecía de sentido sin amor y mucho menos sin pasión, pues seguramente lo
hiciera todo sin cabeza, pero nunca sin pasión.
Probablemente seamos muchos los que nos sintamos diferentes por
negarnos a vivir de otra manera, pero la Sra. Sapicornia ya había visto huellas
de Unicornios otras veces.
Estos relatos son para los que nos gusta sonreír y porque no... dramatizar
también :)